Eduardo Pascual Arxé, ex presidente de Eurobank ha sido detenido en Burkina Faso. Contra Arxé había una orden de búsqueda y captura de la Audiencia Nacional, dictada en 2015, para estar acusado de la quiebra la entidad bancaria y, también, por su implicación en el caso de los ERE fraudulentos que afectan a la Junta de Andalucía.
El ex presidente de Eurobank está reclamado por una causa abierta sobre la despatrimonialització de Eurobank del Mediterráneo en 2003. Esta entidad suspendió pagos en septiembre de aquel año, y dejó una deuda de 150 millones de euros con sus acreedores.
La Fiscalía pide hasta 7 años y 10 meses de prisión para él y sus colaboradores, y también el pago de 8,26 millones de euros por los daños causados, puesto que los considera autores de un delito societario continuado, otro de desobediencia a la autoridad judicial, además de falsedad, apropiación indebida, estafa y blanqueo de capitales.
Arxé, por otro lado, también fue detenido en marzo de 2013 por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil a raíz de la investigación de los ERE que afecta a la Junta de Andalucía.
El ahora detenido dirigía la mutua Fortia Vida, integrada en el grupo de empresas Vitalia y, después de pasar 14 meses en prisión por su implicación en la causa de los ERE fraudulentos a través de la consultora Vitalia, salió después de pagar una fianza de 6.000 euros y otros 5.000 de caución, y huyó después.
Ante la jueza Mercedes Alaya, que empezó la instrucción de los ERE, Arxé declaró que el PSOE se había financiado con el dinero de los expedientes laborales aprobados desde la Junta de Andalucía.
El ex presidente de Eurobank cifró en 98 millones la cantidad que salió de la Junta de Andalucía hacia Fortia Vida, empresa que, según dijo ante la juez, controlaba el Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), y que 18 millones se destinaron «al bolsillo» de las sociedades de cuatro empresarios vinculados con la cúpula del PSOE.
Arxé añadió que este dinero se invirtió en dos hoteles en la República Dominicana controlados por estos empresarios vinculados con el PSOE. Eduardo Pascual Arxé llegó a decir que lo qué se había investigado hasta aquel momento en el caso de los ERE era sólo «la punta del iceberg».