En la particular estructura del clan Pujol, la figura de Josep Pujol Ferrusola -el tercer hijo del matrimonio- emerge como el nuevo pater familias y el cerebro de la organización. Esto se desprende del informe de la Organización Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), conseguido por EL TRIANGLE, sobre las actividades de los socios de Drago Capital SL, Luis Iglesias y Oleguer Pujol, y que ha sido incorporado al sumario que instruye el juez Santiago Pedraz, de la Audiencia Nacional.
Este expediente fue abierto el 15 de junio de 2012, mucho antes de que estallara mediática y políticamente el caso Pujol. Esto quiere decir que la Agencia Tributaria ya seguía, desde hace tres años, los movimientos económicos de la familia Pujol y, en especial, del hijo pequeño, Oleguer, que ha montado una telaraña societaria en paraísos fiscales.
Luis Iglesias creó Drago Capital SL en 2001 y dos años más tarde, cuando su padre había abandonado la presidencia de la Generalitat, se incorporó Oleguer Pujol. A pesar de que, de entrada, no figuraba cómo accionista -lo fue a partir de 2008-, el informe de la ONIF explica que los dos amigos tenían, de buen comienzo, un pacto según el cual los beneficios de los negocios inmobiliarios que hicieran se los repartirían al 50%.
El trust de Guernsey
El 26 de septiembre de 2006, Oleguer Pujol constituyó la estructura fiduciaria The Itaca Investment Trust, a través de la empresa de servicios financieros Carey Group, ubicada en Saint Peter Port, la capital del paraíso fiscal de la isla de Guernsey (islas del Canal). Según la documentación recogida y aportada por la ONIF, figuraban como beneficiarios de The Itaca Investment Trust, Oleguer Pujol; su madre, Marta Ferrusola; su hermano Josep y su amigo Luis Iglesias.
En un fax datado el 9 de septiembre de 2009, Oleguer Pujol dispuso que, en caso de deceso, la beneficiaria de estos fondos sería su mujer, Sònia Soms. Además, establecía que su hermano Josep sería el albacea del «tesoro» depositado en la isla de Guernsey, hasta que sus hijos cumplan los 18 años. Este esquema recuerda al del supuesto legado que el abuelo Florenci Pujol depositó en Suiza/Andorra, del que eran beneficiarios Marta Ferrusola y, cuando se conviertieran en mayores de edad, los siete hijos del matrimonio presidencial.
La novedad es el papel central que, como se puede constatar, asume Josep Pujol en este montaje offshore. No sólo figura como beneficiario, sino que se erige en futuro albacea del trust en caso de desaparición de Oleguer. Esto quiere decir que el ‘clan’ no se fía del hijo primogénito Jordi -que había administrado el legado del abuelo- y ha otorgado a Josep, que pasa para ser el hermano más listo, el nuevo rol de pater familias.
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