El Parlament ha rechazado este miércoles las enmiendas a la totalidad del proyecto de ley que prevé una bajada de impuestos para el macrocomplejo de juego y casinos que se está planificando en los terrenos colindantes a PortAventura. Sólo CiU ha votado en contra de las enmiendas, pero la abstención del PSC, el PP y ERC ha permitido que la reforma legislativa pase este trámite. Por su parte, ICV, Ciutadans y la CUP, que habían presentado las mociones, han votado a favor de ellas y han criticado el proyecto.
De las abstenciones la más llamativa es la de Esquerra, cuyo líder, Oriol Junqueras, se había mostrado partidario meses atrás de prohibir el juego y hasta el momento se había negado a introducir ventajas fiscales para que BCNWorld sea una realidad. Pere Aragonés, que ha tomado la palabra en nombre de los republicanos, ha puesto en duda que su partido vaya a facilitar la tramitación de la Ley, si bien es cierto que este miércoles podrían haber marcado distancias con el Govern y han optado por no hacerlo.
Por su parte, tanto populares como socialistas han criticado al Govern, los primeros por subir los impuestos a los ciudadanos mientras se los rebajan a los casinos; y los segundos por fijarse en modelos equivocados sobre el macrocomplejo y no tratar de hacer uno modélico. Por su parte, el Conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, ha señalado que con esta reforma legislativa se facilitará la llegada de nuevas inversiones a Catalunya y ha defendido que la rebaja impositiva es necesaria para poder competir con otros paraísos del juego como Singapur o Las Vegas.
Los más críticos han sido los diputados de los partidos que habían presentado las enmiendas. Mientras desde Ciudatans Jordi Cañas ha comparado la ley con convertir Eurodisney en Macao, en referencia a PortAventura, David Fernández ha lamentado que se apoye un proyecto que aúna lo peor del «capitalismo ludópata». Por su parte, Hortensia Grau (ICV) ha sentenciado que en el fondo lo que se está haciendo es fomentar la especulación urbanística y la ludopatía.
Dentro de la reforma legislativa, el Gobierno catalán prevé otorgar seis licencias de casinos a Salou y/o Vilaseca; los municipios en cuyos terrenos se prevé la construcción del macrocomplejo.
