A Pilar Rahola. En el careo que hoy el programa "Salvados" hará entre dos de los candidatos a la alcaldía de Barcelona, la actual alcaldesa Ada Colau y el ex pimer ministro francés, Manuel Valls, el presentador Jordi Évole plantea un juego con nombres de catalanes vivos que quizás merecerían el nombre de una calle -este honor sólo se da a personas difuntas…-; entre ellos el de la periodista y escritora Rahola, oportunidad que Valls aprovecha para bromear y meterse con ella.
El juego empieza con el nombre del Conde de Godó. Curiosamente, a pesar de que la Vanguardia (de la cual es propietario) es especialmente dura con la alcaldesa, Colau se conforma: "Se le podría poner por trascendencia histórica e importancia en la ciudad". En cambio, la candidata de los comunes dice que no haría el mismo con Rahola: "No lo veo, la verdad".
Por otro lado, Valls le pondría una calle a Isidre Fainé o a Joan Antoni Samarach, pero tampoco a Rahola. El candidato tira de ironía para justificarlo: "Incluso viva se lo merece, Rahola. Es un personaje único, simpático, moderado, es la voz de un separatismo muy duro, incluso supremacista… Pues no".
Rahola responde a todo el mundo. De entrada no entiende que Évole la ponga en medio de sus juegos: "Y a mí por qué me metes?", pregunta. Con Valls es menos delicada: "Que un personaje tan sinuoso, incoherente y oportunista como Valls me insulte, es de aquellas cosas que dejan bien el día…".
