El expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, ha presentado una querella criminal contra la juez del Tribunal Supremo, Carmen Lamela, a la cual acusa de los delitos de prevaricación y falsedad documental en el proceso judicial que lo mantuvo durante 643 en prisión preventiva. Lamela, que en aquel momento era jueza de la Audiencia Nacional, se negó sistemáticamente a dictar la libertad bajo fianza para Rosell.
Sandro Rosell acusa a Lamela de ocultar pruebas que, según avanza El Mundo, le eran favorables para demostrar su inocencia de las acusaciones de blanqueo de dinero en la licitación de derechos de explotación sobre la selección brasileña de fútbol, acusaciones por las cuales fue juzgado en la Audiencia Nacional y de las que finalmente fue absuelto.
Los abogados de Rosell también han preparado una demanda de 10 millones de euros contra el Estado, como compensación por los perjuicios causados a su imagen y las pérdidas económicas que sufrió durante los meses que estuvo en la prisión.
La defensa de Rosell argumenta que el juicio contra el expresidente del Barça no tuvo las garantías mínimas y que la Justicia no actuó de buena fe. De acabar recibiendo estos 10 millones, Rosell ha anunciado que se darán a ciudadanos sin recursos económicos que no puedan pagarse una defensa en condiciones ante procesos judiciales.