La Guardia Civil ha detenido este lunes por la mañana a nueve miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) a los que atribuye los preparativos de "acciones violentas". Fuentes cercanas al caso citadas por El País especifican que los detenidos habían comprado material para fabricar explosivos y que habrían probado bombas de fabricación casera en una casa aislada.
Según la misma información, los investigadores han actuado contra el que consideran que podría ser el comienzo de un nuevo grupo terrorista. En el marco de este operativo, ordenado por el juzgado central número 6 de la Audiencia Nacional, la Guardia Civil ha practicado una decena de registros en domicilios y locales de varias localidades, entre ellas Sabadell, Cerdanyola, Mollet del Vallès, Santa Perpetua de Mogoda y Sant Vicenç de Torelló.
Las personas detenidas, según los investigadores, planeaban acciones violentas para el segundo aniversario del 1-O y la sentencia del Tribunal Supremo contra los dirigentes del proceso. La Guardia Civil ha explicado en un comunicado que se ha llevado documentación y material informático para analizarlos, así como "abundante material y sustancias precursoras para la fabricación de explosivos susceptibles (a espera de confirmación por los especialistas) de ser empleados en la fabricación de artefactos". Según Catalunya Ràdio, se investiga a los detenidos por rebelión, terrorismo y tenencia de explosivos. Fuentes jurídicas citadas por la Cadena SER apuntan que los detenidos pretendían atentar en edificios oficiales de Barcelona coincidiendo con la sentencia del Supremo.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, no ha descartado que se produzcan más detenciones y registros. La operación se encuenta bajo secreto de sumario.
