La Generalitat estudia aplicar confinamientos los fines de semana

La consejera Budó dice que el actual estado de alarma limita la capacidad de decisión del gobierno catalán
Meritxell Budó
Meritxell Budó

La consejera de Presidencia y portavoz del gobierno catalán, Meritxell Budó, ha afirmado que el ejecutivo catalán está estudiando aplicar el confinamiento de la población los fines de semana para luchar contra la covid-19. En una entrevista a Catalunya Ràdio, Budó ha afirmado que "es un escenario que hay sobre la mesa porque ciertamente durante el fin de semana es cuando hay más interacción social", añadiendo que "por lo tanto iremos viendo qué medidas tenemos que ir tomando en función de lo que nos digan los datos epidemiológicos".

Meritxell Budó ha justificado que el gobierno catalán esté estudiando esta medida porque "tenemos unos datos que son malos, tenemos unos datos que son preocupantes, empezamos a tener una tensión importante en el sistema sanitario, y por lo tanto tendremos que ir tomando todas aquellas medidas que reduzcan la interacción social".

La consejera Budó ha insistido, pero, que "tenemos que evitar el confinamiento total del mes de marzo, a no ser que sea estrictamente necesario y que sea la única, la única, la única opción que podamos aplicar", remachando que "por lo tanto tenemos que ir explorando diferentes escenarios, y ciertamente uno de ellos podría ser este" de hacer confinamientos de fin de semana.

Budó también ha criticado el decreto de estado de alarma que acaba de dictar el gobierno central, al considerarlo que limita la capacidad de los gobiernos autonómicos y, así, el de la Generalitat de Cataluña para decidir nuevas medidas para luchar contra la pandemia. Para Budó, el decreto "nos hace el efecto que se ha quedado corto, que es un decreto insuficiente para hacer todo aquello que como gobierno querríamos hacer o pediríamos poder hacer en el caso que fuera necesario". Budó afirma que el decreto del gobierno central "limita las decisiones que como gobierno de Cataluña podemos tomar y por lo tanto no es aquello que Pedro Sánchez había explicado que sería este estado de alarma".

En cuanto a la posibilidad que la evolución de la pandemia pueda acabar afectando la fecha del 14 de febrero para celebrar elecciones en el Parlament, Budó ha asegurado que "desde el gobierno de Cataluña estamos trabajando para definir de qué manera se pueden llevar a cabo unas elecciones en plena pandemia, garantizado el derecho a voto de todo el mundo, que nadie deje de votar por culpa de la pandemia (…) y que haya todas las medidas sanitarias, de higiene y protección para poder garantizar la seguridad en este sentido".

La consejera portavoz ha reconocido, pero, que "si no podemos garantizar el derecho a voto de todo el mundo o si la situación pandèmica recomienda que estas elecciones se tengan que retrasar tendremos que tomar la decisión que corresponda".

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