El expresidente de la Generalitat, José Montilla, ha pedido al independentismo una pausa del procés mientras dure la emergencia sanitaria y ha instado al gobierno catalán a sumarse a los pactos por la reconstrucción impulsados por el ejecutivo central: "No utilicemos el procés para impedir o dificultar ese pacto de Estado para la reconstrucción social y económica".
El exdirigente socialista lo ha solicitado en un artículo publicado este miércoles en La Vanguardia, donde ha defendido que hará falta un pacto parecido al propuesto por Pedro Sánchez en Cataluña y ha pedido al ejecutivo catalán que no se quede al margen del impulsado por el gobierno central: "Catalunya debe ser parte de las soluciones y no un obstáculo para alcanzarlas. Para defender el prestigio y la utilidad de nuestras instituciones de autogobierno, demasiado abocadas a la confrontación política. Para defender el propio autogobierno y garantizar, con una participación constructiva, que las medidas que se adopten no impliquen ningún paso atrás en la distribución del poder territorial".
Montilla ha dejado claro que no reclama al movimiento independentista que renuncie a su objetivo político sino una parada: "Pido una pausa. No una renuncia, ni un abandono del diálogo necesario para buscar las soluciones a los problemas políticos de fondo". Al mismo tiempo, el exmandatario catalán ha recordado que la independencia es un objetivo "del todo legítimo si se sitúa en el marco del respecto a las reglas de juego democráticas".
Así mismo, el expresidente catalán ha pedido que las críticas efectuadas a las otras administraciones públicas vayan acompañadas de un "espíritu constructivo" y de "corresponsabilidad"."¿Qué sentido tiene convertirse en profetas de la catástrofe, diciendo a los otros lo que hay que hacer sin ser capaces de hacer correctamente aquello que les corresponde?", ha cuestionado el también el exsenador del PSC.
Montilla ha señalado que la crisis actual es mucho más grave que la de 2008, ha admitido que muchos ciudadanos se sintieron desprotegidos por parte de los gobiernos y ha lamentado que algunos dirigentes políticos se sumaran al clima de insatisfacción por intereses políticos: "En Catalunya, alguien consideró la utilidad de subirse a la ola de insatisfacción para evitar las consecuencias y sacar rédito político. El resultado lo hemos visto: una década perdida para nuestro país".
Por otro lado, el expresidente de la Generalitat ha asegurado que hay que trabajar para salvar tanto la economía como la salud, puesto que entiende que no hay dicotomía entre las dos áreas.
