El audio de una conversación telefónica de la número dos de ERC, Marta Rovira, con quien fue número dos de la Vicepresidencia económica, Josep Maria Jové, evidencia el punto de vista de la dirigente republicana sobre la dedicación de los tres partidos independentistas en la organización del referéndum del 1-O.
Entre esos comentarios, revelados por El Confidencial, destaca aquel en el que Rovira afirma, sobre la búsqueda de «síndicos territoriales», que «ni el PDECat ni la CUP lo hacen», si bien también se queja de que «nuestras territoriales fallan también». «Todo lo estamos haciendo nosotros», le responde Jové.
«Escucha, yo doy alas a Lluís Salvadó, vale, con el tema mes de octubre porque acabaremos pringando por aquí. Van a saco esta gente», expresa Rovira. «Con el tema de la carta famosa Coro lo ha liado», dice Jové aparentemente refiriéndose a Lluís Corominas (PDECat). «Te juro que ayer Mundó [el entonces consejero de Justicia] me dejó frita», se queja también la dirigente de ERC.
«Tengo la sensación de que estamos cada día más solos», lamentaba Rovira en aquella conversación, en la que mostraba hastiada. «No estoy de acuerdo con Solé que ha dicho que la piscina cada día está más llena. No lo veo, eh, no veo que se llene. Al revés», aseguraba. «Tenemos agujeros», admitía Jové. «Aquí la gente llorando en el departamento», respondía el número dos de Economía sobre un contratiempo. «Hoy nos han metido tres», remataba.
Asens y los comunes
Rovira y Jové se preguntaron como era posible que el teniente de alcalde de Barcelona Jaume Asens conociese la existencia de un determinado informe (sobre «funcionarios, trabajadores, ciudadanos, todo esto», según era descrito). Rovira expresaba, aparentemente en referencia a los comunes, que «no son de fiar», aunque decía que «quizás Asens sí».
En otra llamada, revelada por el mismo diario, Rovira se refería a la posible intención del PDECat de abrir «una guerra en Barcelona» (con los comunes, se supone) y planteaba planes para dos escenarios, uno en el supuesto de que los comunes colaboraran facilitando puntos de votación del 1-O. Otra conversación pone de manifiesto el rol de estas figuras de ERC en el intento por conseguir que alcaldes cedieran locales para votar.
