Los dos sindicatos españoles con más representación en el mundo laboral –UGT y CCOO-, numerosas entidades y líderes sociales han hecho un llamamiento para reclamar que la reconstrucción de la economía hundida por la Covid-19 sea justa y tenga en cuenta los intereses de la mayoría de la población. "Un acuerdo para rescatar las personas, los trabajos y los salarios. Por unas vidas dignas. 27 de junio 2020. Movilízate", este es el llamamiento que han hecho. Muchas de las concentraciones, que se harán de forma presencial, se celebrarán a media mañanade este sábado. En Catalunya habrá en Barcelona, Cornellà, Girona, Granollers, Igualada, Lleida, Mataró, Tarragona, Terrassa, Vic y Vilafranca del Penedès.
El manifiesto de convocatoria de estas movilizaciones fue presentado el pasado miércoles 27 de junio en un acto en el que participaron los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Alvarez, y personalidades del mundo cultural como la escritora Almudena Grandes o del mundo académico como la investigadora Alicia Duran. El manifiesto lleva el título de "Por un pacto por la reconstrucción nacional" y lo avalan firmantes como Pedro Almodóvar, Joan Manuel Serrat, Ignacio Escolar, Marta Flinch, Joaquín Sabina, Alberto San Juan o Cristina Fallarás.
"Saldremos de esta si reforzamos nuestros servicios públicos, que son la garantía para ejercer los derechos de ciudadanía en igualdad. Nuestro sistema sanitario, sociosanitario y de cuidados ha mostrado el valor de sus profesionales, pero es el hecho de contar con un sistema público y universal adecuadamente financiado el que garantiza el acceso de toda la población a la salud y a los cuidados. Nunca más recortes en sanidad. Nunca más mercantilización de los cuidados", se lee en el manifiesto que también considera que "hay que reforzar de manera decidida los servicios públicos. Hace falta un gran acuerdo para liderar la salida de la crisis hacia un nuevo modelo industrial, energético, turístico, de movilidad y de comercio, de forma que las transiciones sean justas para las personas y que no se quede nadie atrás. Hace falta erradicar la vergüenza del trabajo en las campañas agrícolas que no garantizan condiciones de salud y de vivienda mínimas. No se puede esperar en regularizar a las personas inmigradas para garantizar los derechos humanos. Es de justicia tratar de manera digna a las personas que hacen digna la vida de otras personas en los hogares, en las cuestiones de limpieza, provisión de alimentos, salud y atención social, en las residencias para la gente mayor o persones dependientes".
En el manifiesto se critica al gobierno español al considerar que "no es admisible que miles de personas no hayan cobrado todavía su prestación ni que la gente se encuentre con problemas burocráticos en la tramitación del Ingreso Mínimo Vital" y en su versión catalana también hay quejas por la actuación del gobierno de la Generalitat. "No podemos admitir que el Gobierno de Catalunya tenga paralizados los espacios de diálogo con los agentes sociales, que las mesas de negociación colectiva de la Generalitat sean una farsa, que no tengamos un plan acordado para el regreso a las escuelas ni para gestionar las residencias y que los servicios de ocupación no se hayan reforzado con nuevos acuerdos y más personal".
Acaba diciendo que "saldremos de la crisis si no nos dejamos arrastrar por la confrontación ni el electoralismo. La crisis sanitaria y económica más intensa que hemos conocido en tiempo de paz no se puede abordar desde la dialéctica de la guerra. Ahora la gente necesita trabajar desde la concordia y alejarse de la crispación" y reclamando a las fuerzas políticas, sociales y económicas un gran pacto por la reconstrucción social y económica "capaz de ofrecer un futuro a la juventud. Nada más. Ni nada menos".
