El gobierno español reclamará el cese de todos los cónsules honorarios que apoyen al proceso soberanista. Así lo ha dejado claro este lunes el ejecutivo central en una respuesta parlamentaria en que ha subrayado que "en aquellos casos en que un cónsul honorario de algún país actúe en apoyo del separatismo, el gobierno español trasladará a la embajada correspondiente el desagrado del gobierno por tal actitud".
Una comunicación que "se traducirá en una pérdida de confianza como interlocutor en la persona en cuestión, a cualesquier efectos relacionados con el ejercicio de sus funciones oficiales", es decir, su cese.
Lo ha subrayado el ejecutivo de Pedro Sánchez en una respuesta al diputado en el Congreso Jordi Xuclà (PDECat) a raíz del cese provocado al cónsul honorario de Grecia Fernando Turró, que participó en la manifestación del 11 de septiembre y que provocó las quejas y la retirada de confianza del ministro de Asuntos exteriores, Josep Borrell.
Aquella fue la primera ocasión que, con el gobierno del PSOE, se cesó un cónsul honorario en Cataluña por motivos relacionados con el proceso soberanista. Con el del PP, pero, fueron cuatro los cesados en los últimos años por estos motivos, y los anteriores eran de Finlandia, Filipinas, Letonia y Bulgaria.
