Uno de cada seis hogares de clase media cayó en la pobreza por la crisis y no se ha recuperado

El crecimiento económico ha beneficiado desproporcionadamente las rentas altas
Barcelona, ciudad de contrastes entre ricos y pobres.
Barcelona, ciudad de contrastes entre ricos y pobres.

La sociedad española se ha polarizado a expensas del adelgazamiento de las clases medianas. Se estima que uno de cada seis hogares de clase media cayó en la pobreza durante la crisis y no ha recuperado la situación anterior a la fase de crecimiento. La clase media española tiene hoy 10 puntos menos de la renta estatal en comparación con la que ostentaba en 2000. Estas son algunas de las conclusiones a las cuales llega el informe Desigualdad 1 – Igualdad de oportunidades 0. La inmovilidad social y la condena de la pobreza, elaborado por la asociación Oxfam Intermón con motivo de la celebración del Foro Económico Mundial de Davos, que reúne en esta población de los Alpes suizos la élite de la política y la economía mundiales.

El informe denuncia que la desigualdad en España se disparó durante la última crisis y que, a pesar de la recuperación económica de los últimos años, no se ha podido revertir todavía. "La inmovilidad social dentro de nuestras fronteras hace que los que son ricos y pobres se perpetúen y las personas más empobrecidas tengan más difícil cambiar su situación a lo largo de su vida. La sociedad española se ha polarizado a expensas del adelgazamiento de las clases medianas", afirma. El director general de Oxfam Intermón, José María Vera, considera que "esta alarmante crisis global de desigualdad es el reflejo del fracaso del sistema económico actual. Los gobiernos tienen que actuar inmediatamente para conseguir cambios reales y un futuro digno para todo el mundo y no sólo para una minoría privilegiada".

En España, la pobreza aumentó durante la crisis cuatro veces más de lo que se ha reducido con la recuperación. Oxfam Intermón señala que "dentro de nuestras fronteras, desde el inicio de la recuperación, el crecimiento económico ha beneficiado desproporcionadamente las rentas altas". Así, el año pasado aumentaron en 16.500 los hogares en los que no entró ningún tipo de ingreso, y llegaron a ser 617.000. Mientras los ultramilionarios –personas que tienen unos activos limpios que equivalen o superan los 40 millones de euros– aumentaron en un 4%, y llegaron a la cifra récord de 1.690 personas.

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