Activistas de la plataforma Aturem la Subhasta han ocupado al menos dos de los 46 inmuebles procedentes de herencias intestadas que la Generalitat de Cataluña prevé subastar este jueves. La plataforma especificaba a primera hora de la mañana que «de momento» habían ocupado en Barcelona un local en el barrio del Farró y un piso a el Clot.
Aunque el departamento de Economía, por voz del vicepresidente Pere Aragonés, se ha comprometido a dedicar los 5 millones que prevé ingresar por esta vía a vivienda pública, Aturem la Subhasta ha presionado para que los inmuebles se destinaran a vivienda de protección oficial y no a adjudicarlos «al mejor postor».
Aturem la Subhasta ha organizado una protesta ante el Espacio Bital, un recinto de la Generalitat ubicado en l’Hospitalet que alberga la puja. Esta plataforma ha celebrado que algunos licitadores «reculan ante el bloqueo de la gente» y ha asegurado: «Tenemos los tres accesos en el edificio bloqueados. ¡De momento lo estamos consiguiendo!».
«Hemos logrado que la subhasta sea un gran desastre», han celebrado los activistas en Twitter posteriormente. Como balance de su lucha, Aturem la Subhasta ha piado: «Llibrereteria 16 ha quedado fuera de la subasta. Casi la mitad ha quedado desierta por falta de licitadores. Hasta 4 inmuebles ocupados por la gente. ¡Y a las 11h de la mañana, la subasta todavía no ha podido empezar gracias a los bloqueos de la gente!». Se han presentado ofertas por 27 inmuebles.
El pasado día 15, los activistas por la vivienda de Barcelona entraron en las dependencias del departamento de Economía para convencer a Aragonés de que no se ejecutara la subasta y para exigir a la Generalitat que no operara «como un especulador». La Generalitat argumenta que los inmuebles no reúnen las condiciones para ser destinados a vivienda pública.
