Entidades en defensa de los derechos LGTBI han aplaudido la luz verde a la proposición de ley para garantizar los derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros e intersexuales, aprobada este miércoles en el Parlamento de Cataluña.
En una rueda de prensa posterior a la votación, las entidades han asegurado que se trata «de uno de los marcos normativos más avanzados de Europa» y que supone un «paso adelante» en favor de los derechos humanos, la igualdad y la calidad democrática.
«No es una ley simbólica, es necesaria, valiente y muy ambiciosa», ha lamentado Alberto Martín, presidente de la plataforma LGTBI. Así, las entidades han recordado que es necesario «presupuesto y voluntad política» para desarrollar la nueva ley y han advertido de que serán «vigilantes» con su cumplimiento.
Fina Campàs, vicepresidenta del Consejo LGTBI, ha aplaudido que la norma «refuerza» un modelo de país que «entiende» los derechos del colectivo como «responsabilidad pública y compartida». Asimismo, ha lamentado que la ley regule la discriminación en ámbitos como la educación, la salud, la vivienda, el trabajo o la seguridad.
Por parte de la entidad Creación Positiva, Luisa García ha puesto el foco en el caso de las lesbianas y ha celebrado que la ley ponga una «mirada» en esta «sigla» del colectivo y ha lamentado la «invisibilización histórica» que esta parte del colectivo ha partido. «Las lesbianas existimos y por fin hay una norma que regula la lesbofobia», ha dicho.
Cristian Carrer, director del Observatorio contra la LGTBI-fobia, ha recordado que la normativa ha visto la luz después de «muchos meses de trabajo» y ha celebrado las «nuevas demandas y realidades» que incluye. Ahora bien, ha advertido de que hace falta «voluntad política» para desplegarla y ha exigido que no quede como un «brindis al sol». «Seremos vigilantes», ha advertido.
Laia Serra, jurista y defensora de derechos humanos, ha concluido la rueda de prensa aplaudiendo que la ley ponga el foco en la «deuda histórica» existente hasta ahora con «el lesbofeminismo, las personas intersex y el colectivo trans». «Ya era hora de que tuvieran un protagonismo», ha sentenciado.
