Seis personas se han querellado contra los Mossos d’Esquadra por el uso «indebido» de gas pimienta durante la huelga por Palestina del pasado 15 de octubre. Los denunciantes son manifestantes, representantes sindicales y profesionales de la comunicación, representados por una coordinación jurídica formada por Alerta Solidària, Irídia, la CGT, la Intersindical y la Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC).
Los hechos tuvieron lugar en la estación de Sants de Barcelona, donde desde la Coalición Prou Complicitat amb Israel han explicado que, pocos minutos después de iniciarse una sentada pacífica frente al hotel donde se alojaba un equipo israelí de baloncesto, los Mossos comenzaron una carga e hicieron uso «reiterado» de gas pimienta «directamente en la cara, y sin ningún aviso previo».
La querella, que alega vulneraciones del derecho de huelga, de protesta y de libertad de información, es contra los mossos que usaron gas pimienta durante la protesta. Según las entidades, a través de las imágenes han detectado que tres agentes hicieron uso de ello, pero no los han podido identificar. Es por este motivo que, dentro de la acción, reclaman al Departamento de Interior que los identifique.
La actuación policial de la huelga por Palestina también provocó la querella del fotoperiodista Joan Gálvez, quien recibió en el brazo un disparo de un proyectil de foam de los Mossos.
Un arma potencialmente lesiva
La coordinadora de litigio en Irídia, Sònia Olivella, ha destacado que el gas pimienta es un «arma potencialmente lesiva» que, de acuerdo con las recomendaciones internacionales y los principios policiales de necesidad y proporcionalidad, no puede ser utilizada ante resistencias pasivas, ni como herramienta de dispersión, sino sólo como elemento defensivo. En el caso de la actuación en la estación de Sants, Olivella ha subrayado que los Mossos usaron el gas pimienta «de una forma absolutamente injustificada».
«No podemos tolerar que se normalice actuar así contra manifestantes pacíficos», ha insistido Olivella, que ha señalado que se trata de un producto que «no es inocuo» y que los agentes dispararon a poca distancia de la cara de los manifestantes, sin previo aviso y sin que hubiera habido ninguna actuación previa. Además, ha denunciado que los agentes que hicieron uso del gas pimienta no llevaban visible el número operativo policial (NOP).
Olivella ha advertido de que no se trata de un hecho aislado y que se han recogido un total de seis situaciones en las que los Mossos han usado gas pimienta en protestas en octubre por Palestina. Las entidades también subrayan que la actuación policial «impidió o dificultó» la labor de varios periodistas, vulnerando el derecho a la libertad de información, y reclaman al Departamento de Interior que haga público















