El hecho de que el cantante Loquillo, opuesto al independentismo durante los años del procés, mostrara en TV3 que lleva tatuado en el brazo un escudo de la ciudad de Barcelona, y negara que sea anticatalanista, ha hecho saltar a un buen puñado de independentistas en las redes.
El motivo es que el tatuaje muestra una versión del escudo que no incluye juntas en el mismo cuadrante las cuatro barras de la senyera, sino solo dos en cada cuadrante de fondo amarillo, por lo que indican que corresponde al escudo que fue oficial durante la dictadura franquista y hasta 1984.
«Le preguntan por Cataluña y enseña un escudo de Barcelona (nada que ver con la pregunta) franquista en el que se eliminaron dos barras en la senyera«, ha destacado el mediático publicista Lluís Carrasco, por ejemplo.
La aparición de las dos barras en cada cuadrante, sin embargo, tiene un origen y un recorrido mucho más largo que la dictadura de Franco. El exdiputado en el Parlamento catalán y exeurodiputado de Ciudadanos, Jordi Cañas, se ha burlado del supuesto origen franquista del símbolo difundiendo la noticia, publicada hace seis años en La Vanguardia, del hallazgo del primer escudo de la ciudad de Barcelona, de 1369, que muestra un escudo como el del brazo de Loquillo.
Otros usuarios han recordado que incluso el primer escudo del FC Barcelona, de 1899, incluía dos barras rojas por cuadrante, cosa que solo volvió a pasar durante algunos años de la dictadura franquista.

