El escritor Javier Cercas ha protagonizado una de las sesiones más multitudinarias de la primera jornada de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, en una conversación con la periodista Elena Hevia en el pabellón de Barcelona. El autor de Terra Alta, Soldados de Salamina, Anatomía de un instante y El loco de Dios en el fin del mundo ha reflexionado sobre su obra y los motores que lo impulsan a escribir. Ha explicado que un autor escribe porque tiene un «desajuste» y que, en su caso, es el «desarraigo«, tanto geográfico como religioso.
Cercas ha afirmado que muchos escritores escriben porque «intentan arreglar las cosas de esta manera» y porque perciben que «hay algo que no está bien». También ha repasado su llegada a Barcelona, una ciudad «muy diferente a la de ahora» para alguien procedente de «la provincia», que veía como un lugar «increíble». Ha señalado que en la ciudad conviven «dos literaturas», una en catalán y una en castellano, a menudo con «cierta incomunicación» y se ha definido como «un ejemplo raro de extrema comunicación entre ambas».
En cuanto al valor de la literatura, Cercas ha remarcado que acude para encontrar placer pero también «conocimiento«. Según él, «la literatura de verdad nunca proporciona certezas, ni tampoco respuestas, sino más preguntas e inquietudes».
