Al menos 69 personas sin hogar o que habían vivido en la calle han muerto este año en Barcelona, según los datos de la Fundación Arrels. Se trata de la cifra que corresponde a los fallecimientos registrados desde el mes de noviembre de 2024, cuando la entidad realizó el último acto de recuerdo a las personas sin hogar muertas.
Arrels ha concretado que un 34% de los fallecidos de este perfil contabilizados en 2025 vivían en la calle y que un 72,5% han fallecido por enfermedades y problemas de salud. Un 14,7% eran mujeres y un 85%, hombres.
La entidad ha recordado que «vivir en la calle acorta la vida» y ha especificado que una persona sin hogar tiene una esperanza de vida media 25 años inferior a la del resto de la población de la capital catalana.
Como hace cada año, Arrels ha recordado en un acto convocado ante la Catedral este jueves por la tarde a todas las personas sin hogar que han fallecido en las calles de la ciudad, en el que participan una veintena de entidades locales. Desde el año 2016, esta fundación ha contabilizado más de 600 muertes de personas sin techo.













