La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el concejal barcelonés de ERC Jordi Coronas ya están en su casa tras ser liberados por las autoridades israelíes. Nada más aterrizar en el aeropuerto, Colau ha denunciado el «trato denigrante» por parte de Israel y ha advertido de que se han «violado todos los derechos» de los activistas de la Global Sumud Flotilla.
«Nos han tratado mal, pero no es nada comparado con lo que pasa al pueblo de Palestina cada día», ha señalado Colau, que ha cargado contra el «secuestro ilegal» por parte de las autoridades israelíes tras ser abordados en aguas internacionales.
Por su parte, Coronas explicado que los días después de la detención han sido «complicados y tensos», y que han sufrido «maltrato psicológico». En este sentido, ha afirmado que Israel representa «la antidemocracia» y lo ha calificado de Estado «fascista, corrupto y genocida». «La prioridad debe ser acabar con este gobierno», ha exigido Coronas.
En declaraciones a los medios de comunicación que les esperaban en el aeropuerto, la exalcaldesa de Barcelona y el concejal republicano han hecho un llamamiento a mantener las movilizaciones para acabar con el «genocidio» en Palestina y para reclamar el retorno de los activistas que aún continúan encarcelados en Israel.
La diputada de la CUP Pilar Castillejo y el miembro del secretariado nacional del partido Adrià Plazas es «muy posible» que lleguen mañana a Barcelona, según ha informado la propia formación. De hecho, los demás activistas españoles de la Flotilla que quedaban en la prisión israelí de Ketziot, a excepción de una detenida, vuelven esta noche a Barcelona, Madrid y Bilbao.













