La nueva tasa turística en Cataluña se aplaza, como mínimo a abril de 2026, según ha avanzado este viernes El Periódico. La tramitación de la ley no está finalizada en el Parlamento. El Gobierno de la Generalitat aprobó un decreto-ley, pero ERC y Comuns acordaron con el Departamento de Economíatramitarlo como ley con el objetivo de blindar su aplicación.
Así, el incremento de esta tasa está siendo negociada, desde principios de año, entre el Govern con Comuns y ERC. La implementación de esta nueva tarifa estaba prevista para mayo, después de que la Generalitat lo aprobara mediante un decreto ley, pero antes de la entrada en vigor de la medida, el Gobierno se vio obligado a aplazar la subida para tramitarla vía proyecto de ley en lugar de hacerlo con un decreto ley. Esta decisión supuso retrasar la aplicación y trasladar la entrada en vigor de los nuevos precios al siguiente periodo de cobro, que debía ser en octubre.
Inicialmente, el acuerdo entre el Gobierno catalán y Comuns fijaba duplicar la tasa turística de Cataluña. Esto afectaba a todos los establecimientos turísticos (hoteles, pisos turísticos y cruceros), y en el caso de Barcelona, el gravamen podría elevarse hasta un máximo de 15 euros por persona y noche. Al mismo tiempo, en el acuerdo entre Economía y Comuns para retrasar la nueva tasa turística, se decidió destinar los cerca de 60 millones de euros que se dejarían de recoger con el impuesto a políticas de vivienda.