La guerra comercial entre la Unión Europea y China ha escalado este viernes con el anuncio del ministerio de Comercio chino sobre la imposición de aranceles temporales de hasta el 62% a la carne de cerdo europea, una decisión que llega como respuesta a los gravámenes que Bruselas aplicó a los coches eléctricos chinos.
Estos aranceles, que entrarán en vigor a partir del 10 de septiembre, variarán entre el 20% para las empresas que colaboren en las investigaciones iniciadas por Pekín y un máximo del 62% para las que no lo hagan.
La Comisión Europea, por su parte, ha cuestionado abiertamente la legitimidad de los argumentos chinos y ha asegurado que mantiene «todas las opciones» abiertas para proteger al sector.
Una tensión comercial creciente
La decisión china es el último capítulo de una escalada de tensiones que se agravó el año pasado, cuando la UE aprobó aranceles adicionales de hasta el 36% a los vehículos eléctricos procedentes de China, acusándolos de «competencia desleal». En respuesta, Pekín abrió investigaciones por competencia desleal no sólo sobre la carne de cerdo, sino también sobre los productos lácteos europeos.
El portavoz de Comercio de la Comisión Europea, Olof Gill, ha criticado las investigaciones chinas, afirmando que están «basadas en alegaciones cuestionables» y que no se ajustan a las normativas de la Organización Mundial del Comercio. A pesar de la tensión, ambas partes han mantenido conversaciones para intentar encontrar una solución negociada.
El lamento de la Unió de Pagesos
Unió de Pagesos ha lamentado que el sector porcino acabe siendo la «moneda de cambio» debido a que, en su día, la Unión Europea decidió poner aranceles a los coches eléctricos que venían de China. El responsable de porcino del sindicato, Rossend Saltiveri, ha criticado que ahora tengan que pagar los platos rotos «injustamente».
Aunque todavía es pronto para realizar una valoración de la repercusión concreta que tendrán por el hecho de que los aranceles se pondrán en función de cada empresa y el volumen de producción, “es evidente que una noticia de estas es negativa”.
Saltiveri también ha destacado que el precio del cerdo lleva 9 semanas a la baja, ya en torno a los 20 céntimos, y ahora solo faltaba una noticia como esta para peligrar la estabilidad del sector.














