El hundimiento del suelo de un piso en un edificio de Badalona este miércoles ha dejado dos mujeres heridas y una quincena de personas desalojadas. Según han informado los Bomberos, una vecina del primer piso de 71 años ha caído a la vivienda de abajo cuando ha colapsado el suelo, en un agujero de unos 3 metros cuadrados. Su hija, de 40 años, también ha sido atendida por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y las dos han sido trasladadas en estado menos grave al Hospital Germans Trias i Pujol.
El siniestro ha obligado a vaciar completamente de vecinos el inmueble con 12 viviendas, que el Grupo de Estructuras Colapsadas de los Bomberos y servicios municipales han considerado inhabitables. En el momento del hundimiento, en la vivienda también estaban el marido y la hija del matrimonio, que han resultado ilesos. En la planta baja no había nadie, según indican los Bomberos.
Como tras la valoración de los técnicos municipales se ha decidido que los inquilinos no podrán volver a su casa por daños estructurales, los Bomberos han hecho un primer acompañamiento con algunos vecinos para recoger sus pertenencias más urgentes, y volverán por la tarde para coger más.
Según informa el Ayuntamiento de Badalona, nueve de los doce pisos estaban habitados, mientras que los otros tres, vacíos. Las personas afectadas serán atendidas por los Servicios Sociales en el Servicio Básico de Atención Social número 5 de Llefià.
Los Bomberos hablan de una causa «patológica»
Los Bomberos de la Generalitat han asegurado que la causa del hundimiento en Badalona es «patológica» y que los daños en el inmueble son «importantes». En una atención a los medios frente al edificio, el subjefe de guardia de emergencias de la región metropolitana norte del cuerpo, Roger Llinàs, ha explicado que ha colapsado el encofrado de la primera planta, que «probablemente» se trata de un edificio «con cemento aluminoso» y que «las humedades» a lo largo de los años lo han ido debilitando.
Llinàs ha explicado que, por lo que han podido observar, y por el color y el estado de las vigas, habían «sufrido por dilatación y se veía la armadura». Justo después de la inspección ocular, han determinado que no se podría permanecer en el inmueble «hasta que no se haga un peritaje completo de daños y se valore la habitabilidad del edificio».
En este sentido, ha aventurado que una posibilidad es que el daño podría estar «muy localizado» donde se ha producido el hundimiento, lo que querría decir que se podría hacer «una reparación y un realojamiento» de los vecinos. Con todo, no ha descartado que se constate que todas las vigas están en un estado similar y que los expertos deberían valorar «si es o no viable el edificio».
Los vecinos, consultados por la ACN han denunciado «dejadez» de la propiedad. Aseguran que todos los residentes son inquilinos, y denuncian que el inmueble tenía defectos que la propiedad conocía.