El primer día del congreso nacional del PP, José María Aznar ha pronunciado un discurso rotundo y sin concesiones hacia Pedro Sánchez y los pactos de su gobierno. Aznar define la situación del Ejecutivo como una «golfería estructural» y denuncia que, si el PSOE mantiene acuerdos con partidos y líderes que califica de «delincuentes», podría acabar él mismo «en la cárcel» porque sería «su ambiente».
El expresidente acusa al actual gobierno de utilizar la nación como moneda de cambio y convertir al Estado en botín. Criticar la reforma penal pactada con presidiarios y sentencia: «Si te asocias con presidiarios y pactos una amnistía con delincuentes, no te extrañe acabar en la cárcel porque ese es tu ambiente».
Aznar deja claro que el PP se encuentra en una «responsabilidad inmensa»: denunciar estos pactos y «dar la vuelta a España» en busca de un cambio urgente.
Mariano Rajoy, que también ha hablado, apoya la idea señalando que mientras ellos endurlecieron leyes contra la corrupción, el PSOE ha debilitado la independencia judicial y ha estrechado lazos con actores cuestionados.