Icono del sitio El Triangle

El sindicato SUT dice que Tatxo Benet cierra el Museo del Arte Prohibido «para deshacerse de los huelguistas»

Manifestación del sindicato SUT a las puertas del Museo del Arte Prohibido (Foto: @vaga_map)

El sindicato Solidaridad y Unidad de los Trabajadores (SUT), convocante de la huelga indefinida de cuatro meses que ha acabado con el cierre del Museo del Arte Prohibido de Barcelona, ha acusado a la dirección del museo, propiedad del CEO de Mediapro, Tatxo Benet, de bajar las persianas «para deshacerse de los huelguistas» y ha tachado sus explicaciones de «psicodélicas y delirantes». Benet dijo que el cierre se debía a la huelga.

En un comunicado, el sindicato enmarca el cierre en «la actuación represiva y antiobrera que el Museo del Arte Prohibido ha mantenido sistemáticamente desde que los trabajadores subcontratados de atención al visitante presentaron sus reivindicaciones». Apunta, en este sentido, que «prefiere cerrar» en lugar de atender las reivindicaciones de la plantilla, y señala la «hipocresía y el cinismo» del museo.

«Primero, elimina una subcontrata para despedir a la mitad de la plantilla subcontratada que había reclamado no estar sujetos a condiciones de completa precariedad laboral. Después, ha sustituido a los huelguistas con vigilantes de seguridad, contratando a porteros de discoteca y usando a los cuerpos policiales para sus intereses privados. Finalmente, el Museo cierra para deshacerse del resto de la plantilla que está en huelga y no tener que acceder a sus reivindicaciones«, resume el sindicato.

En opinión de SUT, la dirección está «aprovechando la situación para hacerse una gran publicidad gratuita», «vistiéndose de víctima de no se sabe qué confabulación y mintiendo impúdica y sistemáticamente sobre la actuación de los huelguistas y de los piquetes», afirma el comunicado. «Estamos ante una maniobra de marketing cínicamente premeditada y calculada con la que el Museo del Arte Prohibido ha intentado conseguir el eco y publicidad que no ha conseguido mientras estaba abierto», manifiesta el sindicato.

Las «mentiras» del museo

SUT también asegura en el escrito que el comunicado del museo «está lleno de mentiras en relación con la actuación de los piquetes». Según destaca, su actuación era informativa y «se ha dado en concentraciones comunicadas con antelación al Departamento del Interior, con responsables nominales e identificados».

Además, el sindicato asegura que los piquetes «se han limitado a informar de la situación y de la problemática laboral y han apelado a la solidaridad de los visitantes, que han sido completamente libres de entrar o no en el museo». La mayoría de las personas, indica SUT, se «solidarizaron con los huelguistas y no entraron» en el recinto, pero «todo el que ha decidido visitar el museo ha podido entrar sin problema durante todo el tiempo que ha durado la huelga», afirma el sindicato.

Otra de las «mentiras» que ha criticado la organización sindical es su «supuesta no disposición» a negociar. Según SUT, «propusimos una reunión antes de empezar la huelga; propusimos una reunión al segundo día de huelga que ni se respondió; iniciamos nosotros las dos mediaciones en el Departamento de Trabajo; propusimos nosotros una reunión que tampoco fue correspondida cuando no funcionaron las mediaciones, y todavía otra propuesta de reunión que se respondió exigiendo la desconvocatoria de la huelga como condición para negociar».

Críticas a Tatxo Benet

El sindicato también ha cargado contra el propietario del Museo del Arte Prohibido, Tatxo Benet. Haciendo alusión a la figura que el museo tiene del dictador Franco dentro de una nevera, que simboliza que el franquismo está en hibernación, la organización sindical ha señalado que «no hay ninguna diferencia cualitativa en los métodos que ellos utilizan contra la clase obrera», y que «su identidad con el franquismo es completa».

En este sentido, SUT recuerda que Benet dijo, en relación con la huelga indefinida, que «es un problema del sistema, que permite juntar el derecho de huelga y el de manifestación y plantarse en solidaridad ante el museo». «La propuesta del propietario del Museo del Arte Prohibido es eliminar el derecho de reunión y el de la libertad sindical que incluye el derecho de huelga y a iniciar conflictos colectivos», lamenta el sindicato.

«La Dirección del Museo del Arte Prohibido, acostumbrada a tratar a los trabajadores como mobiliario humano, se ha topado con una resistencia y determinación que no se esperaban, con algo denominado sindicalismo de clase que desearían que desapareciera», destaca SUT, que manifiesta que la huelga «no tiene nada que ver con el contenido de la exposición ni el nombre de su propietario». sino que es «para combatir las condiciones laborales de explotación y precariedad a las que somete a la plantilla subcontratada».

Salir de la versión móvil
Ir a la barra de herramientas