Junts per Catalunya no ha hecho caso de las presiones sindicales y ha registrado en el Congreso de los Diputados una enmienda a la totalidad contra el proyecto de ley de reducción de jornada a 37,5 horas.
El partido presidido por Carles Puigdemont argumenta que la viabilidad de las pequeñas y medianas empresas catalanas puede verse gravemente perjudicada por esta imposición rígida.
En el texto registrado en la mesa de la Comisión de Trabajo, Economía Social, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones este miércoles, el grupo insta al Gobierno español a “abrir un proceso de diálogo social real y riguroso que permita evaluar todas las implicaciones de una reforma de esta envergadura” y que permita “presentar una nueva propuesta basada en la flexibilidad y con un enfoque equilibrado y gradual”.
El Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz y Junts suspendieron la reunión que tenían prevista ayer martes con la intención de acercar posiciones. Pero finalmente Míriam Nogueras ha cumplido con la amenaza de presentar una enmienda a la totalidad.
En el texto registrado, la formación indica que el impacto de la reducción de jornada “será desigual tanto sectorial como territorialmente y donde mayores dificultades generará será en la micro, la pequeña y la mediana empresa”, según informa ACN.
Carencias del mercado laboral
Además, Junts señala las carencias del mercado laboral y ha insistido en que el proyecto pactado entre el Ministerio de Trabajo y los sindicatos no hace suficientes distinciones sobre las medidas de las empresas.
Junts también argumenta que el acuerdo entre el ministerio y los principales sindicatos “no cuenta con la unanimidad de todas las partes del diálogo social”. Juntos añade que “la mejor fórmula para ganar derechos es mediante el acuerdo y el consenso” entre trabajadores y empresa, que pasa por la negociación colectiva















