La Administración central del Estado, la Generalitat de Cataluña, los ayuntamientos y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) trabajan en un protocolo de colaboración para proteger el litoral metropolitano de fenómenos como la regresión de las playas o los efectos del cambio climático, entre los que se encuentran los cada vez más intensos efectos de los temporales.
El gerente del AMB, Ramon Torra, ha anunciado este esfuerzo conjunto este miércoles desde la playa del Litoral de Sant Adrià de Besòs, que se ha reabierto después después de cuatro años. El objetivo, según ha explicado Torra, es que todas las administraciones implicadas puedan planificar con “perspectiva” las acciones de futuro que se deben hacer, programarlas y financiarlas.
El gerente del AMB ha recordado que los 30 kilómetros de playas metropolitanas “son el espacio público de mayor uso” y que hay que protegerlas para garantizar su disfrute.















