Los tres agentes de los Mossos investigados por la huida de Barcelona del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont el 8 de agosto del año pasado se han opuesto a que declaren el también expresidente Pere Aragonès, el actual presidente del Parlamento de Cataluña, Josep Rull, o el exconsejero de Interior Joan Ignasi Elena, entre otros.
Según el escrito al que ha tenido acceso la ACN, la defensa considera las diligencias innecesarias y «prospectivas» -es decir, que exceden el ámbito admisible de la investigación-, y cree que hacen una «instrumentalización política del proceso penal».
Los testigos los solicitó la acusación popular, encarnada por la asociación de extrema derecha Hazte Oír, y ahora el instructor deberá decidir si los acepta o no.
La entidad también quiere que declare el entonces director general de los Mossos, Pere Ferrer, o el bombero de la Generalitat que fue arrestado en septiembre por escoltar al expresidente por las calles de Barcelona, aunque después se archivó la causa contra él.
Para el 30 de junio está prevista la declaración como testigo del entonces comisario jefe del cuerpo, Eduard Sallent, y otros mandos.
