Las teorías del independentismo hiperventilado beben de raíces europeas que abonaban supuestas verdades que conducían a la conclusión de que existe una raza catalana diferente y superior a la raza española. Estas teorías alborotadas han sido asumidas por algunos grupos independentistas que han llegado hasta la actualidad. Uno de los opúsculos más recientes que existen sobre esta cuestión se titula Fundamentos del racismo y fue editado en 1980 por el grupo Nosaltres Sols!, heredero del partido fundado por Daniel Cardona en los años 30 del siglo pasado.
Daniel Cardona también es el padre espiritual de otras formaciones como Estat Català o el Front Nacional de Catalunya (FNC), además de haber sido el inspirador del grupo complotista Bandera Negra, que en 1926 intentó asesinar al rey Alfonso XIII.
El nombre de Daniel Cardona vuelve a estar de moda entre los grupos más integristas del catalanismo actual, como el Movimiento Identitario Catalán (MIC), Nosaltres Sols! o Renaixença Nacional Catalana (RNC), además de ser la figura de referencia de personajes como Quim Torra o Sílvia Orriols.
¡En las publicaciones de Nosaltres Sols! del siglo pasado se habla de una «red clandestina paramilitar» denominada Organizació Militar Nosaltres Sols (OMNS), liderada por el propio Cardona, que nunca pasó de unos centenares de miembros, con una implantación especial en el Baix Llobregat. Cabe recordar que Cardona fue alcalde de Sant Just Desvern entre 1931 y 1934. Algunos historiadores subrayan que Cardona no era parafascista, aunque reconocen que un grupo importante de Nosaltres Sols! sí tenía tendencias en este sentido. Daniel Cardona diferenciaba entre el nacional-fascismo y el nacionalismo liberador. Sin embargo, algunos de sus postulados coincidían con la visión germanófila que proponían otros líderes separatistas. Y en las teorías apoyadas por su partido había connotaciones puramente nacionalsocialistas, como el objetivo de crear una Gran Cataluña a partir del Principado o la superioridad de la raza catalana sobre la española por ser de raíz «aria indogermánica».
¡Está plenamente acreditado que Nosaltres Sols! tenía, poco después de su creación, un sector germanófilo liderado por Manuel Blasi, mientras que otro dirigente, Baldomer Palazón, era italianófilo. Cardona, en cambio, estaba enfrascado con el IRA (la traducción de Nosaltres Solos! al irlandés sería el Sinn Féin) hasta tal punto que su sobrenombre era L’Irlandès.
El historiador Xosé M. Núñez Seixas refuerza esta tesis. Núñez localizó en Alemania un memorándum de Nosaltres Sols! en el que ofrecía su colaboración a los nazis. «En junio de 1935, un líder anónimo de Nosaltres Sols! (probablemente Manuel Blasi, el más germanófilo) visita Alemania y elabora en Hamburgo un memorándum que entrega al Ministerio de Propaganda del III Reich, donde contempla las posibles ventajas mutuas que surgirían de una colaboración efectiva entre Alemania y el separatismo catalán». No hubo respuesta por parte de Berlín.
Pero al año siguiente, tras las elecciones, el cónsul alemán en Barcelona recibió una ampliación de la propuesta y advirtió a Berlín que debería tenerse en cuenta porque «los separatistas son una fuerza con la que se deberá contar en el futuro y por las eventuales ventajas materiales (garantía de bases para submarinos, de apoyo logístico, etc.) que se prometían en caso de conflicto».
Núñez Seixas explica que «el documento –de presumible autoría de Manuel Blasi y/o Baldomer Palazón, máximos representantes del profejismo en Nosaltres Sols!, contra la línea democrática y antifascista encarnada por Daniel Cardona– consta de dos partes: una, correspondiente al primer proyecto, fechado en Hamburgo en julio de 1935 y una adenda fechada en Barcelona el 19 de marzo de 1936. En castellano, empieza con la explicitación de que se trata de un ‘proyecto de organización relativo a intercambio económico-cultural entre Cataluña y Alemania'».
El documento acaba con la petición de apoyo financiero para la publicación de un diario para «contrarrestar la impetuosa propaganda rusa». Con este diario pensaban despertar la conciencia nacional y los catalanes del Estado francés, para crear así un nuevo problema en este país, en conjunción con vascofranceses y bretones, aprovechando sus contactos con organizaciones independentistas de estos territorios.
«Ofrecen su colaboración (extendida también en el País Vasco, Baleares y Madrid) en calidad de servicios de información sobre objetivos militares españoles; en caso de guerra, se prestan a proporcionar ‘grupos bien instruidos’ a los alemanes, e ‘incluso aceptaríamos su tipo de organización de milicias, podríamos estudiar la forma en que fueran instruidos por ustedes un grupo de catalanes y vascos en el manejo de aviones y en la preparación de explosivos’, y aunque España fuera neutral, prometen preparar puntos de aprovisionamiento de submarinos y de fuerzas aéreas en Cataluña».
Los independentistas catalanes comunican a los alemanes que «nuestros hermanos de Euskadi ya tienen establecida una organización que les permitiría apoderarse de la mayoría de las fábricas de armas de su territorio sin que se interrumpieran las tareas de fabricación». Núñez Seixas aventura incluso que «es posible que Palazón y R. Fagés, del PNC, llegaran a organizar prácticas de tiro conjuntas con las Juventudes Hitlerianas de la Organización Exterior del NSDAP en el Montseny, y que Blasi llegara a un acuerdo con los nazis para la ayuda en la formación de cuadros». Esta afirmación está extraída de las teorías de Ucelay-Da Cal, que recogió manifestaciones orales, aunque Núñez duda de que con el estallido de la Guerra Civil se hubieran podido llevar a cabo estas prácticas.
El mensaje a los nazis era claro: «Una Cataluña libre representaría para Alemania, si no estuviera consumado, un paso definitivo en el hundimiento de Francia y la existencia de un país amigo en el Occidente Mediterráneo». En la adenda de marzo de 1936, tras la victoria del Frente Popular, vaticinan que si las fuerzas católicas se ponen de acuerdo con «elementos militares de graduación» podría triunfar un «golpe de Estado». Pero aseguraban a los alemanes que «tanto si triunfaba la revolución social como si lo hacía la dictadura militar, ambas servirían a la política francesa, cosa que no convendría a Alemania…, por ello, se intentaba convencer una vez más al III Reich de que debería apoyar el separatismo catalán», explica el historiador Núñez Seixas.
El sector profesista de Nosaltres Sols! teorizó sobre la «superioridad racial de los catalanes sobre los ‘africanos’ españoles», que basaba en supuestas evidencias científicas. Algunas de estas teorías fueron expuestas por el veterinario Pere Màrtir Rossell i Vilar en 1930 con su obra La raza. Rossell militaron en ERC (llegó a ser diputado por esta formación), fue director del Zoo de Barcelona y colaboró con la Sociedad de Estudios Militares.
En 1980, un renacido partido Nosaltres Sols! agrupó las esencias de estas teorías en un opúsculo con el título Fundamentos del racismo, que se conserva en los archivos de la UAB. «La evolución en la conformación racial en España y Cataluña Principado ha sido sensiblemente diferente», dice el documento. Asegura que Cataluña tiene formación de los pueblos célticos, íberos, griegos («de raza aria indogermánica»), romanos («arios indogermánicos»), godos («arios») y occitanos («arios de procedencia germánica que repoblaron el Principado después de la peste que disminuyó la población»).
Según Nosaltres Sols!, «la influencia árabe y judía ha sido mínima y, en todo caso, no ha habido mestización con estas dos razas semíticas. En el País Valenciano y las Islas, después de la Reconquista, los nuevos territorios fueron repoblados con catalanes viejos». Por el contrario, «en España, se han sucedido las mismas avalanchas inmigratorias, exceptuando los jónicos, mucho menos importante los célticos y los occisos. Por otra parte, ha sido considerable, aunque no definitiva, la influencia de árabes y moros que se han mezclado con los autóctonos, especialmente en el sur, dando un mestizaje que se reconoce por unos caracteres morfológicos externos (cabellos más oscuros y arriesgados y color de la piel más oscuro, y que se debe a un poder pigmentario mayor y no al sol). Además, el ángulo anterior mandibular es inferior al del catalán».
En definitiva, las teorías de Nosaltres Sols! afirman que «se puede considerar el español como un elemento de la raza blanca en franca evolución hacia el componente racial africano-semítico (árabe). El coeficiente de inteligencia de un español y un catalán, según las estadísticas publicadas por el Ministerio de Educación y Ciencia español, da una clara ventaja a los catalanes».
Según este opúsculo, «la progresiva degradación racial española puede contagiarse a los catalanes debido a la fuerte inmigración. Los frutos se pueden ver si observamos la diferencia caracterológica entre el hombre del campo, no contaminado por la saga española, y el de las ciudades. El carácter trabajador y europeo del catalán es un factor anímico muy contrario al gandul y proafricano español. Por todo ello, debemos considerar que la configuración racial catalana es más puramente blanca que la española y, por tanto, el catalán es superior al español en el aspecto racial».
*Puedes leer el artículo entero en el número 1618 de la edición en papel de EL TRIANGLE.