La granizada de este sábado ha ocasionado daños de diversa consideración en unas 50.000 hectáreas de cultivos de la plana de Lleida, según Unió de Pagesos. El responsable de fruta dulce de la organización, Jaume Gardeñes, ha explicado a la Agència Catalana de Notícies (ACN) que unas 12.000 o 13.000 hectáreas corresponden a fincas de árboles frutales con daños del 100% y, el resto, a cereales de invierno, con afectaciones de entre el 10% y el 40% en campos de trigo, cebada y alfalfa.
En el caso de la fruta dañada, Gardeñes ha explicado que parte de la producción saldrá adelante, pero su valor comercial «bajará en picado» y los precios se quedarán un 70% por debajo. Ante el cambio climático, el sindicato insiste en reclamar al Gobierno catalán ayudas para redes antigranizo y antiheladas.
Gardeñes ha expuesto que, por culpa de las importantes heladas de 2022, los campesinos han sufrido «recortes muy importantes» en los importes asegurables y que no han estado a tiempo de hacer las habituales ampliaciones de póliza para hacer frente a posibles granizadas». Estos productores habrían ampliado pólizas y tendrían el tema de los kilos bien cubierto, pero nos encontramos con que muchas de las fincas no tienen asegurado ni el 40%», ha lamentado. Según el responsable de fruta dulce del sindicato, la tormenta de este sábado ha afectado a una amplia superficie de territorio, «de Fraga hasta Agramunt».