La vicepresidenta primera del Gobierno español, María Jesús Montero, ha negado este miércoles que el acuerdo con Junts por las medidas de respuesta a los aranceles de Donald Trump genere «privilegios» por ningún territorio. «No hay ningún pacto que beneficie a un partido o un territorio respecto al resto», ha repetido durante la sesión de control celebrada esta mañana en el Congreso.
Por otro lado, la también ministra de Hacienda ha acusado al PP de estar buscando «una excusa» para votar en contra de las acciones que ha anunciado el ejecutivo para amortiguar los efectos de la guerra comercial desplegada por Estados Unidos. «¿Qué necesitan ustedes para comprometerse por una vez con todos los españoles y decir ‘sí’ cuando la patria los necesita?», ha preguntado retóricamente Montero.
«Hablan de que se privilegia un territorio sobre el resto, y esta afirmación es falsa, completamente falsa. Se le explicó ayer, pero les es igual. ¿Votarán a favor de las medidas?», ha manifestado Montero en varias interpelaciones de los diputados del PP. En este sentido, ha resaltado que los ciudadanos se preguntan si los populares intentarán sacar «rédito político» de la situación actual u optarán por tener «sentido de estado» ante una situación que afecta al campo y a la industria española.
El choque entre el PP y el Gobierno español se ha producido a raíz del contenido final del decreto sobre las medidas para los aranceles. En este documento, el Gobierno español, presidido por Pedro Sánchez, que es de viaje oficial a Vietman y China, ha incorporado una disposición adicional que establece que se garantizará que la puesta a disposición de los instrumentos financieros tenga en cuenta el equilibrio territorial y el porcentaje de las exportaciones de bienes con destino a Estados Unidos de las empresas de cada comunidad autónoma, una petición de Junts.
Para hacerlo posible, según el texto, «se articularán mecanismos de participación y seguimiento por parte de las comunidades autónomas» orientados a «garantizar la transparencia, equidad y coherencia de la distribución con este criterio».
Negativa del PP
Todo ello hizo que el PP asegurara el martes que el acuerdo entre el Gobierno español y Junts los expulsaba del consenso. «Pedro Sánchez utiliza de nuevo el dinero público para complacer a sus socios parlamentarios», apuntó el PP en un comunicado. Esta vez, según el PP, «usando una crisis comercial global como pretexto para parcelar las ayudas al gusto del separatismo».
«Hemos entendido el mensaje: seguiremos atendiendo las llamadas que recibimos porque somos un partido de Estado, pero no es posible que cuenten con el PP si es para blanquear un acuerdo que vuelve a comprometer la igualdad entre ciudadanos y entre territorios», dijo ayer al PP. «Sánchez ha pactado una cuota arancelaria con el separatismo a la espalda de los sectores afectados, de las comunidades autónomas, del primer partido del Congreso y del conjunto de los españoles», lamentaban.
Ante las críticas del PP, el ejecutivo español prometió rebajar ayer la tensión con otro comunicado donde admitía que el real decreto incorporaba una disposición pactada con Junts. La Moncloa recordaba que si hay empresas más expuestas a los aranceles a determinadas regiones, en consecuencia podrían necesitar más acceso a financiación. En todo caso, el ejecutivo insiste en que la financiación «se otorgará a las empresas que lo soliciten», y «el seguimiento del uso de los instrumentos se hará de forma transparente, articulando mecanismos de seguimiento con las comunidades autónomas y rindiendo cuentas a las Cortes».
La CEOE pide consenso
Por su parte, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha pedido a todos los grupos parlamentarios que «dejen la política a un lado» y alcancen acuerdos para apoyar a los sectores afectados por los aranceles impuestos por Trump. Según Garamendi, estos deben llegar a pesar de la «interferencia» de Junts. En una entrevista en RNE recogida por la ACN, Garamendi ha asegurado que la pretensión de Junts no tiene sentido, porque las ayudas deben aplicarse en función de las necesidades y no de un porcentaje u otro.