El acuerdo entre Junts y el gobierno español para que Cataluña reciba el 25% de las ayudas del plan de respuesta a los aranceles ha provocado un nuevo choque entre el ejecutivo y el PP.
Una vez conocido el contenido del acuerdo, los populares han asegurado que se sienten «expulsados» del entendimiento sobre el mecanismo, y han acusado a La Moncloa de pactar unilateralmente un cupo arancelario que «reparte de manera desigual los recursos de todos los españoles».
El ejecutivo español ha respondido admitiendo que el texto aprobado en el Consejo de Ministros dispone que los instrumentos «estarán a disposición de las empresas de manera equilibrada territorialmente», pero recordando que la distribución se hará directamente a las empresas y que no faltarán recursos para las que lo necesiten.
Este martes por la mañana, poco antes de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Junts ha anunciado públicamente un acuerdo con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, para incorporar al decreto ley de las ayudas una disposición adicional que –en palabras del diputado Josep Maria Cruset– implica que la movilización de los 14.100 millones anunciados por Pedro Sánchez se hará «en base al peso de las exportaciones de Cataluña a estados Unidos». Esto es, según Junts, que se movilizarán en torno a 3.000 millones de euros «a favor de las empresas catalanas».