El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado este miércoles «aranceles recíprocos» para todos los sectores y para el resto del mundo. Trump ha declarado el 2 de abril como el de la «independencia económica» de Estados Unidos, en un acto en el jardín de la Casa Blanca. «Este es uno de los días más importantes, a mi entender, en la historia de los Estados Unidos. Es nuestra declaración de independencia económica«, ha afirmado Trump.
De acuerdo con una tabla mostrada por Trump, la UE carga gravámenes del 39% en EEUU, y el presidente de EE.UU. ha anunciado unos aranceles del 20% para el bloque comunitario. En cuanto al Reino Unido, «nos cargan un 10% y haremos lo mismo con ellos»; mientras que con China, según Trump, los EE.UU. impondrán un 34%, si bien asegura que las tasas chinas para los productos norteamericanos es del 67%.
Por otro lado, también ha confirmado los aranceles del 25% a todos los automóviles fabricados fuera de Estados Unidos, como anunció la semana pasada.
El anuncio de este miércoles es la culminación de semanas de amenazas de Trump. Los objetivos del presidente de los Estados Unidos en esta guerra comercial son claros, quiere recaudar dinero y proteger la producción nacional. Los aranceles son el instrumento para obligar a las empresas extranjeras a abrir fábricas y dar trabajo a Estados Unidos. Además, la Casa Blanca calcula que el dinero que ingresará gracias a los aranceles le permitirá rebajar impuestos.
La reacción del gobierno de Sánchez
El gobierno español creará una mesa de diálogo social con patronales y sindicatos para canalizar las respuestas a la guerra arancelaria que la administración de Trump ha anunciado. Así se ha acordado hoy mismo en la reunión que esta tarde ha mantenido el presidente del ejecutivo, Pedro Sánchez, y varios ministros con representantes de la parte social. Según ha explicado a posteriori el secretario general de CCOO, Unai Sordo, los sindicatos han pedido una «respuesta coordinada» europea para hacer frente a una situación «no deseable» pero a la que «no habrá más remedio» que hacerle frente. También han reclamado que se activen «fondos de contingencia» para las empresas afectadas y «fórmulas» para garantizar el empleo.
En esta línea, Sánchez se reunirá este jueves a las 12 del mediodía con los representantes de los principales sectores afectados por los aranceles anunciados por Trump. La cita acabará con una comparecencia conjunta donde Sánchez previsiblemente desgranará el plan de contingencia adelantado por la secretaria de Estado de Comercio, Amparo López.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno español, José Manuel Albares, ha mantenido una conversación que ha calificado «de excelente» este miércoles por la tarde con el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio. La charla ha tenido lugar horas antes de la batería de aranceles anunciada por Trump. En un mensaje en la red social X, Albares ha explicado que en el transcurso de la conversación los dos mandatarios han abordado las relaciones España – EEUU, «la importancia del vínculo transatlántico» y el «diálogo y la cooperación en seguridad y comercio», así como los «lazos» con América Latina.
Bruselas prepara una respuesta
Por su parte, Bruselas ha prometido esta tarde que responderá a los aranceles anunciados por Trump, pero ha matizado que contestará «en el momento adecuado». «A la pregunta de si hemos hecho cálculos sobre el potencial impacto en la economía europea, la respuesta es sí, evidentemente […] Pero, estamos a la espera y responderemos en el momento oportuno», ha dicho el portavoz de la Comisión Europea para Comercio, Olof Gill. En este sentido, el ejecutivo de Ursula von der Leyen ha reiterado que su «prioridad» es negociar con la administración norteamericana para frenar la escalada de la guerra comercial. «Lo hemos dejado muy claro en todas las fases de esta saga, nuestra prioridad es sentarse a la mesa y llegar a acuerdos», ha sentenciado Gill.