El Tribunal de Cuentas ha detectado irregularidades en los gastos de Aliança Catalana correspondientes a las elecciones municipales de 2023. El último informe de esta institución expone que la formación de extrema derecha que lidera la diputada en el Parlament Sílvia Orriols superó en 359,62 euros el límite de gasto. El tope máximo que se podía gastar era de 3.516, pero las facturas ascendieron hasta 3.875, un exceso del 10,23%.
En cuanto a las aportaciones que recibió el partido, el Tribunal de Cuentas señala que una aportación privada de 500 euros no cumple la Ley Orgánica del Régimen Electoral (LOREG), que obliga a acreditar el nombre, domicilio y DNI. Además, recibió 3.024 euros de aportaciones por la campaña que no se acreditaron según establece la LOREG.
La Sindicatura de Cuentas indica que el hecho de superar el límite de gasto supone una «irregularidad sancionable» tipificada como muy grave en el artículo 17 de la ley sobre financiación de partidos, y que puede motivar la imposición de una multa, recoge la ACN.
En el ámbito de los gastos por operaciones ordinarias, el informe ha detectado que se gastaron 1.070 euros que no están justificados con una factura. Por ello, el Tribunal de Cuentas considera que este gasto no se puede financiar con subvenciones electorales.
Además, el informe señala que Aliança Catalana no acreditó la apertura de una cuenta bancaria específica para los gastos de las elecciones municipales de 2023, cosa que exige la LOREG. De esta manera, apunta que todos los cobros y pagos que ha declarado se hicieron en efectivo, incumpliendo la legalidad.
Ante esta situación, el Tribunal de Cuentas propone reducir la subvención electoral de Aliança Catalana del doble del importe de los recursos que recibió el partido de extrema derecha sin estar suficientemente acreditados. Es decir, 7.049 euros. Por otro lado, también se le resta 327 euros, que es lo que se gastó de más.
