Durante el último partido del Barça y el Rayo en Montjuïc quedó claro que el conflicto entre la grada de animación y la directiva del Barça continúa abierto. Una pancarta que reclamaba el regreso de la grada de animación, que apareció en el lateral de la segunda gradería en el minuto 12 del partido —en alusión a la animación como jugador número 12—, duró muy poco.
«Queremos la Grada de Animación», decía la pancarta, que duró muy pocos minutos porque la seguridad del Estadio Olímpico se acercó rápidamente para que los aficionados en cuestión retiraran la lona.
El momento estuvo acompañado por cánticos a favor de la grada de animación. La Penya Almogàvers ha lamentado la retirada de la pancarta, un gesto que, según indican, viene a demostrar la falta de «libertad de expresión» de la directiva que preside Joan Laporta.
El presidente Laporta continúa inflexible con el veto a los grupos de animación por no pagar las multas impuestas por la UEFA por varios cánticos la temporada pasada.
