La consellera de Interior, Núria Parlon, ha asegurado que, un mes después del tiroteo en el barrio de La Mina, se ha conseguido «pacificar momentáneamente» la situación y ha pedido que «se deje trabajar a la policía» para seguir avanzando en el objetivo de combatir la delincuencia y garantizar la seguridad de los vecinos.
En una comparecencia en el Parlament, Parlon, que ha puesto en valor que el Govern «ha dado la cara y no se ha escondido» en una situación «muy grave», ha asegurado que se mantendrá el refuerzo policial en el barrio «el tiempo que haga falta», pero ha dejado claro que la «dignificación» de la Mina «tiene que ir más allá».
«Esto no se resuelve con dos furgonetas y 15 agentes», ha añadido en esta línea el jefe de la Policía, Josep Lluís Trapero.















