Los dos acusados de matar el oso Cachou en el Valle de Aran en 2020 se enfrentan a peticiones de prisión superiores a los 2 años. Concretamente, la Fiscalía pide una pena de 2 años y 4 meses para el ex consejero del Conselh Generau d’Aran, José Antonio Boya, y de 2 años y 3 meses para el técnico de Medio Ambiente de la administración aranesa.
Cada uno de ellos están acusados de dos delitos contra la fauna y el técnico, además, de un delito de revelación de secretos. Así lo ha publicado Segre este viernes y lo ha podido confirmar la ACN. También hizo referencia a las peticiones de prisión, sobre todo en el caso de las acusaciones particulares, La Vanguardia, el 9 de octubre pasado.
Aun así, todavía no hay fecha señalada para el juicio. En este sentido, el abogado Enric Rubio, que lleva la defensa del técnico de Medio Ambiente, ha explicado que están pendientes de la resolución del recurso contra la causa que presentaron a la Audiencia de Lleida, al considerar que «siempre hemos sostenido que no hay bastante indicios».
Por su parte, la Fiscalía y la acusación consideran que los dos hombres colaboraron para envenenar Al plantígrado, que apareció muerto el 9 de abril de 2020, en el bosque de Soberpera de Les (Valle de Arán). En el caso del técnico le acusan de facilitar la localización del animal, mientras que en el caso del ex consejero de ser el autor del envenenamiento.
Además de la pena de prisión, se solicita también la inhabilitación temporal para que los acusados puedan ejercer un cargo público o bien actividades relacionadas con la ganadería, la caza y la pesca. También se les pide indemnizaciones.
