La Audiencia de Barcelona ha confirmado el archivo de la causa contra tres agentes de los Mossos d’Esquadra por la pérdida de un ojo provocada por el impacto de un proyectil de foam sufrido por una chica que participaba en una manifestación en la capital catalana a favor del rapero Pablo Hasél, en febrero de 2021.
El auto confirma que la lesión fue causada por un proyectil de los Mossos, pero no ve ninguna mala praxis en la actuación de los dos escopeteros y el mando de los antidisturbios, por lo que no se les puede acusar de ningún delito.
El Centro Irídia para la Defensa de los Derechos Humanos ha lamentado la decisión y ha considerado que el caso demuestra que es necesario un mecanismo externo de control de las actuaciones policiales. Además, según difunde la ACN, da por demostrado que no se cumplieron los protocolos policiales y que, gracias a este caso, se han podido retirar los proyectiles más lesivos que utilizaba la policía catalana.

