La Audiencia de Barcelona ha ratificado el archivo de la investigación contra el expresentador del programa de TV3 Està passant, Toni Soler, y los colaboradores del espacio Jair Domínguez y Judit Martin, por un gag sobre la Virgen del Rocío. El tribunal considera que la conducta denunciada por Abogados Cristianos no es delictiva y está amparada en la libertad de expresión, según ha avanzado El Món y confirmó el abogado defensor Jaume Alonso-Cuevillas. La asociación conservadora había denunciado a los tres comunicadores por injurias, pero un juzgado de Sant Feliu de Llobregat archivó inicialmente la causa.
En su auto, el juez ha considerado que «es plenamente comprensible y respetable que el gag pueda incomodar a determinadas personas, pero ese sentimiento no es suficiente para entender que ha habido un exceso en la libertad de expresión». «La sátira es una forma de expresión artística que por sus inherentes rasgos de exageración y distorsión de la realidad tiene una finalidad provocadora y agitadora», ha recordado. «La simple indignación no supone de por sí un exceso en el ejercicio de la liberta de expresión», ha añadido también.
En la denuncia, Abogados Cristianos incluía varios fragmentos de las frases que se dijeron durante el gag e imágenes del momento. Según la entidad, algunas de las frases eran claramente vejatorias y ofensivas, sobre todo las de contenido sexual. Además, la denuncia incluía las reacciones contrarias de varios políticos, en particular de Andalucía, y representantes de la Iglesia, y seeñalaba que Soler no hubiera querido disculparse.
