Junts ha anunciado este jueves que tiene intención de presentar sus propias enmiendas a la reforma acordada entre el PSOE y EH Bildu de la Ley de Seguridad Ciudadana, la llamada ley mordaza. La portavoz de Junts en el Congreso, MíriamNogueras, ha afirmado que su formación «estudiará» el texto que Bildu les ha hecho llegar este jueves por la mañana, pero ha advertido que Junts «no hace adhesiones» y, por lo tanto, «negociará y presentará sus propuestas durante el periodo de enmiendas».
Nogueras ha destacado que, como otras fuerzas, Juntos «siempre ha defendido la derogación de esta ley regresiva» y apuesta por «una ley democrática de seguridad ciudadana para Cataluña». Sin embargo, ha advertido que ninguna formación, tampoco Bildu, puede pedir su apoyo incondicional a la reforma. «Lo que vale para el PSOE también vale para el resto de partidos políticos», porque «desde Junts negociamos, no hacemos adhesiones».
La Ley de Seguridad Ciudadana en vigor fue aprobada con los únicos votos del PP en 2015, cuando el gobierno de Mariano Rajoy disponía de mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados. En marzo de 2023, en el último intento fallido del Congreso para modificar la ley, Junts ya advirtió que no apoyaría una «reforma light» y votó en contra de la reforma de la Comisión de Interior, como también lo hicieron ERC y Bildu, porque consideraba que el texto acordado entre el PSOE y Podemos mantenía «principios de seguridad antidemocráticos» y solo «rebajaba el tono» de la ley aprobada por los populares.
El acuerdo entre el PSOE y Bildu anunciado por la portavoz de los abertzales, MertxeAizpurua, reforma algunos de los aspectos más polémicos de la ley y apuesta por «avanzar progresivamente en la eliminación de las pelotas de goma», «rebajar a falta leve la desobediencia a agentes policiales» y «agilizar el trámite de asilo con el compromiso de revisar en seis meses las devoluciones en caliente».