El origen del derrame de hidrocarburo que afecta desde este martes por la noche a los ríos Madriu, Valira d’Orient y Gran Valira, en el Principado de Andorra, es la recarga de un tanque de gasóleo de calefacción de unos 4.400 litros de un edificio situado al inicio de la carretera de Engolasters, en Escaldes-Engordany.
A pesar de que es complicado poder «cuantificar» el volumen exacto que ha ido a parar al medio ambiente, el ministro andorrano de Medio Ambiente, Agricultura y Sostenibilidad, Guillem Casal, avanzaba este miércoles que la afectación «es importante o considerable y se tendrá que acabar de evaluar». Ante esta situación, aguas abajo, en la comarca del Alt Urgell, se han cerrado varias captaciones por precaución, a pesar de que el río no ha quedado afectado en esta zona.