El gobierno español ha acordado este martes retirar la tramitación parlamentaria de los objetivos de estabilidad que debían votarse el jueves en el Congreso, según fuentes de la Moncloa.
El ‘no’ de Junts, que la semana pasada volvió a advertir de que no apoyaría el mismo proyecto que ya rechazó en el mes de julio, ha precipitado la decisión de retrasar el debate de la senda en el Congreso, donde el texto no dispone ahora de votos suficientes para prosperar.
El objetivo de la Moncloa es ganar tiempo para intentar alcanzar un acuerdo con el partido de Carles Puigdemont, con el que los negociadores del PSOE se reunieron el viernes en Suiza.
El gobierno español no se resigna y promete continuar trabajando para evitar que decaigan. «Daremos una nueva oportunidad al diálogo para conseguir un acuerdo», ha anunciado después de la reunión semanal del Consejo de Ministros la portavoz del ejecutivo, Pilar Alegría.
Por otro lado, ha acusado el PP de votar «en contra de la gente» y de hacer «cálculos partidistas» con una política «irresponsable y errática» pensada únicamente para desgastar a Pedro Sánchez.
En cuanto a las conversaciones con Junts, fuentes del gobierno ven margen de negociación, pero avisan que la propuesta de un nuevo reparto del déficit con las autonomías es «inviable».