La portavoz de ERC, MartaVilalta, ha lamentado que en el debate congresual del partido «se hayan traspasado líneas rojas» y ha hecho referencia a «señalamientos y linchamientos personales por querer ganar a expensas de desacreditar al otro». «Pediríamos como dirección que todas las candidaturas que se quieren presentar lo hagan desde la proactividad y la positividad», ha dicho en una entrevista en SER Catalunya.
Preguntada por OriolJunqueras, Vilalta ha considerado que su lugar «probablemente ahora no pasa por seguir liderando el partido» pero ha añadido que es una cuestión que no decidirá ella sino la militancia de ERC en el congreso del 30 de noviembre. La portavoz se ha mostrado convencida de que Junqueras continuará siendo un «referente» del independentismo, a pesar de que ha defendido que ERC es un «proyecto colectivo y no individual» y, por lo tanto, que «todo el mundo es necesario pero nadie imprescindible».
Por otro lado, en cuanto a las relaciones entre ERC y Junts, Vilalta ha admitido que están «tocadas», sobre todo por la «parte oficial», y, ante esta situación, ha apostado por «rehacer confianzas» para poder recuperar la mayoría política independentista. Se trata, según ha dicho, de unos «deberes pendientes» y ha fijado como objetivo «recomenzar y reconstruir» en un contexto de «fin de etapa».
Preguntada por la estructura B de ERC, Vilalta ha respondido que se está mezclando una supuesta estructura paralela con lo que ha definido como «campañas de activismo» a través de las redes sociales para «acompañar» mensajes oficiales o defenderse de ataques. Se trata, ha dicho, de prácticas «bastante habituales» en los partidos que no son punibles y lo ha querido diferenciar de los polémicos carteles sobre el Alzheimer contra los Maragall. De todos modos, Vilalta ha explicado que estas «actuaciones habituales» también se han parado ahora mismo porque está «bajo vigilancia» y revisión interna.