El presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, se ha despedido este martes de sus consejeros en la que podría ser la última reunión del Consejo Ejecutivo, antes de que sea investido el socialista Salvador Illa. En una comparecencia desde el Palacio de la Generalitat, el dirigente republicano ha reivindicado que su ejecutivo ha conseguido «acuerdos políticos de fondo», como la financiación, que «supondrán el salto adelante en soberanía más grande desde el 1977».
Acompañado de casi todo el gobierno catalán, Aragonès ha asegurado que presidir la Generalitat ha sido «el honor más grande» de su vida y ha hecho un balance positivo de su mandato, subrayando los adelantos en políticas sociales y en la resolución del conflicto político con el Estado. En este sentido, el presidente en funciones ha defendido la vía del «diálogo y la negociación», pronosticando que «marca el camino, que acabará andando hacia el acuerdo de claridad«. Además, ha reivindicado la «recuperación del Estado del bienestar» después de los recortes y la pandemia.
«En la legislatura que dejamos atrás se ha profundizado más que nunca en el diálogo y la negociación para abordar el conflicto político con el Estado, y creo que ha merecido la pena», ha dicho el presidente en funciones, que ha subrayado que este «compromiso» por parte de su gobierno «ha permitido avanzar, dejar atrás la represión y alcanzar las cuotas de autogobierno más relevantes de los últimos 18 años». En este contexto, también ha situado la amnistía como un «paso de gigante» para «reconocer la injusticia».
En cuanto a la cuestión de la financiación, Aragonès ha subrayado que «asume de forma prácticamente íntegra» su propuesta de financiación singular, con la gestión, recaudación, liquidación e inspección de todos los impuestos. «Será el salto más adelante en soberanía de Cataluña desde la recuperación de la Generalitat con el fin del franquismo», ha sostenido. El jefe del ejecutivo catalán en funciones ha evitado hablar de un «cambio de época» y se ha limitado a decir que «el gobierno que entrará se encontrará una Cataluña mejor que cuando nos la encontramos en 2021».
«He sido independentista desde siempre, y siempre he concebido la independencia como una caja de herramientas para mejorar la vida de la gente», ha defendido Aragonès, que ha concluido: «Acabo la presidencia no con todas las herramientas que tendría, pero con más herramientas de las que nos encontramos».