Toni Comín niega que cargara cerca de 5.000 euros correspondientes a sus vacaciones de Semana Santa del año pasado al Consell de la República, del cual es vicepresidente. Afirma que se trata de una revancha del exgerente de la entidad, Sergi Miquel, después de que lo despidieran.
«Es muy doloroso y quizás tendré que tomar alguna acción legal porque tampoco se puede dejar pasar las cosas de este modo», ha explicado Comín en una entrevista a TV3.
Según el vicepresidente del Consell, las acusaciones responden a una «voluntad de revancha personal» por parte de la exgerente de la entidad.
Comín explica que Miquel «poco después de que le comunicáramos que no podía continuar, hizo el mail donde intentaba hacer pasar como gastos personales lo que eran gastos derivados de viajes de trabajo».
Según explica El Mon, el entonces gerente no admitió los gastos presentados por Comín. El coste del viaje de Comín subiría a 4.786,78 euros según los documentos que publica el digital.