Porque dijo que «el cien por cien de las personas que pasaban por aquí y terminaban en La Modelo eran comunistas». El antropólogo Manuel Delgado fue invitado a intervenir el 11 de junio en el acto que cada 15 días organiza la Comisisó de la Dignitat ante la comisaría de la policía nacional de Vía Layetana, en Barcelona. Las concentraciones quincenales denuncian las torturas que se cometieron en esta comisaría durante el franquismo y reclaman su cierre.
Delgado ya debería olfatearse que lo que iba a decir no gustaría a los independentistas presentes en la concentración y empezó pidiendo perdón. “No quiero molestar a nadie y creo en la emancipación de nuestro pueblo. Indiscutible. Pero el cien por cien de las personas que pasaban por aquí y terminaban en La Modelo eran comunistas. Básicamente tenemos que ser justos. Entonces, los únicos que luchaban contra el franquismo eran los comunistas”, decía cuando se tuvo que callar por los silbidos y protestas de los asistentes. Se escuchó, incluso, una voz que le pedía “¡déjalo!”.
“Si había alguien más yo no le conocí”, osó añadir el antropólogo. Había una treintena de personas, entre las que se vio a un risueño Lluís Llach, recientemente elegido presidente de la Assemblea Nacional Catalana. En la red social X, Delgado comentó el incidente: “Qué cosas. Me invitan a que cuente mi experiencia en manos del Brigada Político-Social. Cuento lo que viví y lo que vi y me gritan. Todo por recordar que la inmensa mayoría de los represaliados en el tardofranquista eran comunistas. Toda memoria es olvido”.
