Quien fue vicepresidente del Parlament de Catalunya por Junts, Josep Costa, enviaba esta semana a los intelectuales e ideólogos de Esquerra Republicana Catalunya (ERC) a servir copas al Hard Rock. Lo hacía, después de las últimas elecciones catalanas y del descalabro sufrido por sus ex socios republicanos, en la red social X: “La derrota de ERC es tan grave que la dimisión de Pere Aragonès es insuficiente. Dado que la brillante estrategia de “ensanchar la base” ha hecho perder la mayoría independentista, todos los intelectuales e ideólogos del partido deberían buscarse trabajo sirviendo copas en el Hard Rock”.
De hecho, Costa ya se adelantaba a Aragonès y pedía la misma noche electoral dimisiones, así en general, apuntando quizás también hacia Junts, partido con el que también ha tenido sus roces, ya que no le hicieron presidente del Parlament, como ansiaba: “Creo que ya se puede decir que en el Parlament no habrá mayoría independentista, por el descalabro de ERC. Junts ni siquiera suma todos los votos del PDCat. El blog pierde unos 125 mil votos más respecto a 2021, a pesar de un aumento de la participación de 3 puntos. Serán necesarias reflexiones y dimisiones”.
La claque, por supuesto, le ha reído la ocurrencia, y los fans del político y jurista catalán se frotan las manos imaginándose en Aragonès y aún más el presidente de ERC, Oriol Junqueres, sirviendo copas en el Hard Rock, el negocio de casinos protagonista involuntario de los últimos episodios de la política catalana.
