Icono del sitio El Triangle

La parroquia del Espíritu Santo de Barcelona celebra la última misa antes de ser demolida

Última misa en la parroquia del Espíritu Santo (Betevé)

Última misa en la parroquia del Espíritu Santo (Betevé).

La Misa de Domingo de Resurrección marca el final de los servicios religiosos en la histórica parroquia del Espíritu Santo, que será demolida para dar paso a la construcción de una facultad de Medicina en un proyecto respaldado por el Arzobispado de Barcelona y la Fundación Blanquerna desde el 2022. Esta decisión ha generado resistencia entre muchos fieles, que lamentan la pérdida de una comunidad religiosa consolidada en el barrio del Baix Guinardó desde el 1967.

Ante la demolición inminente, la comunidad parroquial encontrará refugio temporal en la iglesia del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, mientras se llevan a cabo las obras del nuevo complejo universitario, que contará con una pequeña capilla y un espacio parroquial dentro de sus instalaciones. Sin embargo, esta transición implica la pérdida de un emblemático vitral de 200 metros cuadrados creado por el taller Raventós en el 1965 y ha generado una ola de nostalgia y reivindicación entre los afectados.

A pesar de los esfuerzos de la comunidad por detener el proyecto, incluyendo la recogida de miles de firmas en contra y la formación de la Asociación de Amigos del Templo Parroquial del Espíritu Santo de Barcelona, parece que el destino de la iglesia está sellado y pronto será parte del pasado, dejando tras de sí no solo un espacio físico, sino también una parte importante de la historia y la identidad del barrio.

Salir de la versión móvil
Ir a la barra de herramientas