Ya hay nieve por encima de los 500 metros en el interior de Cataluña desde esta madrugada y la mañana de domingo. La nevada ha acumulado entre 5 y 10 centímetros en numerosas poblaciones de Osona (Viladrau, Espinelves y Taradell), el Moianès (Collsuspina, Moià) e interior de La Selva (Sant Hilari Sacalm).
También ha nevado en zonas montañosas del prelitoral sur como las montañas de Prades y la sierra del Montsant. Quince carreteras presentan complicaciones por la nieve y el hielo con dos vías cortadas: la C-28 en el puerto de la Bonaigua y la TV-7092 entre Vilaplana y Arbolí. Es necesario llevar cadenas en la N-260 en el puerto del Cantó; la C-28, en el tramo entre Vielha y Baqueira; la N-141 en Bossòst, y la L-501 y L-500 en la Vall de Boí.
En el Eje Transversal (C-25) se recomienda precaución por nieve y hielo en la calzada en un tramo de 25 kilómetros entre Sant Julià de Vilatorta (Osona) y Arbúcies (La Selva) pasando por el coll de Revell, y también en la TV-7004 entre Ulldemolins y Vallclara. Según el Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC), la precipitación irá retirándose lentamente y al mediodía se impondrá el sol y el fuerte viento, sobre todo en el Empordà, el Ebro y en las cotas altas del Pirineo. De hecho, ya se han registrado ráfagas de hasta 138 km/h en l’Hospitalet de l’Infant, 135 km/h en Portbou, 127 km/h en Mas de Barberans, 110 km/h en el Perelló y 107 km/h en Mont-roig del Camp, según datos de las estaciones automáticas de Meteocat y Meteoclimatic.
Las cantidades más destacadas de precipitación se han concentrado en las comarcas del noreste con registros de 44 litros en Roses (23 de los cuales en solo 30 minutos), 43 litros en Llançà, 26 litros en Sant Feliu de Pallerols y 25 litros en Portbou.