Ferrocarriles de la Generalitat, un infierno para los pasajeros en plena ola de calor

Los usuarios se han quejado durante todo el mes porque el aire acondicionado de los trenes no funcionaba y de que a menudo "vamos como sardinas" y "sudando como pollos"

Imatges de vagons dels Ferrocarrils de la Generalita pujades a X per passatgers indignats per la calor i les aglomeracions

“Holaaa, ¿el aire acondicionado no funciona o qué???? Estamos asándonos”, “Ferrocarril 123.06, muertos de calor sin aire y a tope!! Es una vergüenza”, “Tren de la S1 y ABARROTADO en @rubicity. Ya ni te cuento con las subidas de gente a Sant Cugat, de pie, enganchados y con un calorazo de cojones… empezamos el día con alegría”. Éstos son tres de los comentarios que subieron a la red X el primer día de agosto usuarios de los servicios de Ferrocarriles de la Generalitat. Agosto ha sido un mes con temperaturas elevadísimas, hemos vivido oleadas de calor, pero los trenes de Ferrocarriles de la Generalitat han continuado sufriendo un problema que ya se había denunciado otros veranos: los aires acondicionados de los trenes no funcionan o lo hacen con una potencia insuficiente para compensar el bochorno que se padece en su interior.

Estas quejas se han repetido durante todo el mes. A algunas de ellas, los responsables de la red X de FGC han respondido pidiendo a los afectados que les dijeran en qué tren viajaban y asegurando que «pasamos el aviso». Un «pasamos el aviso» que no ha evitado que las denuncias por el calor y las aglomeraciones dentro de los trenes se hayan continuado produciendo todos los días. El texto habitual que la empresa sube a X ante las quejas por el calor en los trenes es: “Si nos dices el número de coche lo revisaremos. Gracias”. Frase que va acompañada de una imagen en la que se ve el lugar donde figura en el convoy su número de identificación. Es una respuesta que no satisface a usuarios como el que, el 18 de agosto, escribió: “Son los trenes enteros y lo sabéis perfectamente. Por cierto, si creéis que con este tipo de respuestas prefabricadas demostráis profesionalidad, es todo lo contrario. Parecéis unos gandules y unos mediocres”.

“Volved a poner los horarios que habían a primera hora de la mañana. Esto es horrible y más con el calor que hace porque en muchos trenes no funciona el aire. Vaya servicio.. #FGC”, pedía una usuaria el 2 de agosto. “Bueno, pues seguimos con los trenes como sardinas y además hace calor en los trenes. No es agradable pagar lo mismo y tener menos frecuencias y sin tener opción a sentarse. ¿Quizás es que la tendencia en agosto ha cambiado y vais un poco desfasados?”, escribía otra usuaria el día 7. Al día siguiente, otra pasajera apuntaba: “El tren que circula de Terrassa a plaza Catalunya va totalmente lleno y sin aire. Moriremos ahogados. Gracias”.

Los problemas por el calor en los trenes se han dado, este mes, tanto por la mañana como en el resto del día. “Hola, buenas noches. En el vagón 112.06 del S1 que va a Terrassa Naciones Unidas creemos que el aire acondicionado está averiado. Hace mucho calor. Estamos todos sudando como pollos”, escribía un viajero el día 9. Algunos usuarios eran muy contundentes en su queja: “Vuestros trenes son una puta sauna. ¿Qué ocurre con el aire acondicionado?” (18 de agosto). Otros, más moderados: “¡¡¡Buenas tardes, en el tren que sale de Provença a Gràcia hace mucho calor!!! ¿¿Pueden por favor informar para que suban el aire?? Gracias”.

El calor se ha sufrido en los trenes pero también en algunas estaciones como han denunciado también en X algunos ciudadanos y ciudadanas. “Por favor poned ventilación en las estaciones, es un horno constante. ¡¡¡He visto a gente enferma de calor!!!”, reclamaba uno de ellos el día 15 de agosto. Al día siguiente, una mujer lo rubricaba: «En Sarrià el calor no se puede aguantar…».

Las quejas y denuncias por el calor que han sufrido los usuarios de los Ferrocarriles de la Generalitat se han dado en un mes lleno de incidencias y problemas en el servicio. Ha habido retrasos frecuentes, disfunciones en el recurso a autobuses sustitutorios para trasladarse entre las estaciones afectadas por las obras que se han realizado para mejorar las instalaciones en algunos tramos e, incluso, dos descarrilamientos, uno de los cuales terminó con el choque de dos máquinas y un operario con una pierna rota.

Este desaguisado y acumulación de quejas coincide con la campaña del gobierno de la Generalitat para reclamar que el español le traspase la gestión integral del servicio de Cercanías de Renfe. La consejera de Territorio, Ester Capella, ha pedido una reunión urgente con la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, para reclamar este traspaso. Si Capella y Sánchez, ambas catalanas, miran el perfil de Ferrocarriles de la Generalitat en X verán cómo hay catalanes y catalanas que, tras la experiencia de este mes de agosto, opinan que quien debería traspasar la gestión es FGC a Renfe.

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