El juzgado penal nº 28 de Barcelona ha condenado a tres meses de prisión a un empresario que amenazó a la plantilla de despedir un 25% si CCOO ganaba las elecciones sindicales de 2019. El juez relata que el propietario de Groundl convocó dos asambleas en septiembre y noviembre de 2019 en el almacén del Prat de Llobregat (Barcelona), cuando se estaba en pleno proceso de elecciones sindicales, para coaccionar a la plantilla en su voto, amenazando con despidos y recortes de sueldo.
Según la sentencia, el empresario incurrió en un delito de amenazas y vulneró la libertad sindical. Las elecciones sindicales eran las primeras donde se presentaba otro sindicato, UGT, que acabó llevándose cuatro de cinco candidaturas.
En un comunicado, CCOO recuerda que sus delegados «ya habían sufrido numerosas irregularidades y abusos en la constitución de la mesa de las elecciones, contaban con varias laudos y habían acudido también a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social para intentar enderezar la situación».
